El barrio del Antiguo, el más antiguo de San Sebastián, es mucho más que un simple rincón de la ciudad. Con su mezcla de tradición y modernidad, este enclave ofrece un viaje en el tiempo que cautiva a todo aquel que lo visita. Desde la playa de Ondarreta hasta las laderas del Monte Igeldo, el Antiguo es un lugar único donde la historia, la gastronomía y el paisaje se encuentran en perfecta armonía.
Lugares Emblemáticos del Antiguo
Palacio de Miramar
Dominando el horizonte desde su atalaya, el Palacio de Miramar es una joya arquitectónica de estilo inglés que en su día fue la residencia de verano de la familia real española. Sus jardines, abiertos al público, son un lugar ideal para pasear mientras se disfruta de las vistas panorámicas de la Bahía de La Concha.
Playa de Ondarreta
La playa de Ondarreta, más pequeña y tranquila que la icónica playa de La Concha, ofrece un refugio perfecto para familias y amantes de la naturaleza. Con sus característicos toldos blanquiazules y vistas privilegiadas a la Isla Santa Clara, Ondarreta es un lugar lleno de encanto.
El Peine del Viento
Al final del paseo marítimo, las esculturas de Eduardo Chillida se alzan como guardianes de la costa. El Peine del Viento no solo es una obra de arte, sino también un punto de conexión entre el mar y el visitante. Las olas interactúan con las estructuras y, a través de agujeros en el suelo, el agua y el viento crean pequeños géiseres que arrancan sonrisas.
Monte Igeldo
Accesible mediante un encantador funicular de 1912, el Monte Igeldo es una experiencia en sí misma. En su cima se encuentra un parque de atracciones con un encanto vintage y unas vistas inigualables que abarcan toda la ciudad y el mar Cantábrico.
Calle Matía y Plaza Sert
El corazón social y comercial del barrio es la Calle Matía, donde tiendas tradicionales conviven con bares y restaurantes. Aquí se vive el auténtico ambiente donostiarra, especialmente los jueves durante el popular Pintxo-Pote. Al final de la calle se encuentra la Plaza Sert, un lugar lleno de terrazas y vida local.
Una Identidad Propia
Si hay algo que caracteriza al Antiguo es su peculiar sentido de identidad. Para muchos de sus vecinos, el túnel Miramart no es solo una infraestructura, sino una verdadera frontera simbólica que separa dos mundos. No es raro escuchar a los habitantes decir que “van a San Sebastián” cuando cruzan el túnel hacia el centro, como si el Antiguo fuera un pequeño reino independiente con sus propias costumbres y tradiciones. Esta manera de expresarse no es casualidad, sino una manifestación del profundo arraigo que los antiguosotarras sienten por su barrio.
Quienes viven aquí consideran que el Antiguo tiene una magia especial que lo distingue del resto de la ciudad. Sus calles, su historia y su vida diaria conforman una identidad tan singular que sus habitantes no necesitan diluirse en la etiqueta más amplia de “donostiarras”. Este sentimiento de pertenencia es tan fuerte que no faltan las bromas entre vecinos, quienes a menudo dicen que “los pasaportes deberían ser necesarios para cruzar el túnel”.
Y es que, si les preguntas dónde viven, te responderán con orgullo y sin dudar: “en el Antiguo”. Es una afirmación que lleva implícito un cariño profundo hacia su comunidad y una declaración de que este barrio no es simplemente una parte de la ciudad, sino un lugar con alma propia. Así, el Antiguo se convierte en mucho más que una ubicación: es un sentimiento, una forma de vida y un rincón especial que invita a ser explorado y admirado.
Un Santo con Historia
Curiosamente, el santo que da nombre a San Sebastián también reside en el Antiguo. La Iglesia de San Sebastián Mártir, situada en la Plaza Alfonso XIII junto a la Calle Matía, es el epicentro espiritual del barrio. Este templo reemplazó al antiguo monasterio consagrado a San Sebastián que existía en el emplazamiento del actual Palacio de Miramar. De ese monasterio, mencionado por primera vez en documentos del año 1014, surgieron las raíces del nombre de la ciudad.
Experiencias Recomendadas
Recorrer el Túnel Miramart
El Túnel de Miramar, conocido como MiramArt, es un pasadizo peatonal de 29 metros que conecta el Paseo de La Concha con la playa de Ondarreta, pasando por debajo del Palacio de Miramar. Inaugurado en junio de 2016, este túnel se ha transformado en una experiencia artística única gracias a la intervención del artista Víctor Goikoetxea y el arquitecto Xabier Barrutieta.
La bóveda del túnel está decorada con paneles que evocan un entorno submarino, creando la sensación de caminar por el fondo del mar. La iluminación de última generación añade dinamismo a la obra, intensificando la experiencia inmersiva. Además, el proyecto incorpora tecnologías sostenibles, como baldosas que generan energía con el paso de los transeúntes, y funcionalidades inteligentes que proporcionan información meteorológica y del estado de las playas.
MiramArt no solo embellece el recorrido entre el centro de San Sebastián y el barrio del Antiguo, sino que también simboliza la unión entre la tierra y el mar, integrando arte, arquitectura y tecnología en un espacio público que invita a la interacción y al disfrute de locales y visitantes.
Disfrutar del Pintxo-Pote
Tanto en la Calle Matía los jueves como en la Plaza Sert los miércoles, el Pintxo-Pote es una excelente oportunidad para saborear la gastronomía local en un ambiente animado. Este evento se ha convertido en una tradición que no solo atrae a los vecinos del barrio, sino también a visitantes de otras partes de San Sebastián y turistas. Por un precio asequible, puedes disfrutar de un pintxo acompañado de una bebida, lo que lo convierte en una manera ideal de probar diferentes especialidades locales sin gastar demasiado.
En la Calle Matía, los bares como Oliyos y La Taberna Matía ofrecen opciones variadas que van desde los pintxos clásicos como la gilda hasta creaciones más innovadoras que combinan sabores tradicionales con toques modernos. En la Plaza Sert, el ambiente es igualmente animado, con terrazas que invitan a relajarse mientras disfrutas de la oferta culinaria. Además, esta actividad es perfecta para socializar, ya que el ambiente festivo y acogedor facilita conocer tanto a locales como a otros visitantes.
El Pintxo-Pote es más que una simple experiencia gastronómica; es una muestra del carácter del Antiguo, un lugar donde la buena comida y la calidez de sus gentes se combinan para crear una experiencia inolvidable.
Subir al Monte Igeldo
El funicular y el parque de atracciones te transportan a otra época mientras disfrutas de vistas espectaculares.
Pasear por el Paseo Marítimo
Los jardines que bordean la playa de Ondarreta son el escenario perfecto para un paseo tranquilo junto al mar.
Gastronomía del Antiguo
El Antiguo es un paraíso para los amantes de la gastronomía. Aquí puedes disfrutar de platos tradicionales como las alubias de Tolosa o el marisco fresco del Cantábrico, además de propuestas más innovadoras en restaurantes de cocina de vanguardia. Desde bares con pintxos clásicos hasta locales minimalistas, la oferta culinaria es tan diversa como deliciosa.
Entre las recomendaciones imprescindibles destacan Bar Oliyos, conocido por sus pintxos clásicos y su ambiente acogedor; Casa María, un restaurante tradicional donde las alubias de Tolosa se preparan de manera excepcional; y Abakando, una opción más moderna que combina cocina creativa con productos locales de alta calidad. Si buscas algo más informal, no te pierdas La Taberna Matía, un lugar perfecto para disfrutar de una cerveza artesanal acompañada de pintxos variados.
También vale la pena mencionar Bistro Ondarreta, o el Restaurante Rekondo, famoso por su extensa bodega de vinos y su cocina vasca de alto nivel. Sea cual sea tu elección, el Antiguo promete deleitarte con una experiencia gastronómica inolvidable.
Dónde Alojarse
El Antiguo ofrece una amplia variedad de opciones de alojamiento que se adaptan a todos los gustos y presupuestos. Desde hoteles con encanto como el Hotel La Galería, ubicado en un edificio de estilo francés del siglo XIX que evoca una atmósfera romántica, hasta modernos establecimientos de cuatro estrellas como el NH Aranzazu, que destaca por su ubicación cómoda y servicios de alta calidad, hay una opción para cada visitante.
Si buscas algo más exclusivo, también puedes considerar alojarte en villas o apartamentos de alquiler vacacional, ideales para quienes prefieren una experiencia más independiente o viajan en grupo. Estas opciones ofrecen la posibilidad de disfrutar del barrio a tu propio ritmo, con la comodidad de sentirte como en casa.
Además, el Antiguo cuenta con una ubicación que combina tranquilidad y conexión con el resto de la ciudad. Sus calles bien iluminadas y los servicios de transporte nocturno te permitirán disfrutar de las actividades del día y la noche en San Sebastián, regresando siempre a un ambiente acogedor y relajado. Entre las recomendaciones adicionales destacan lugares como el Hotel Avenida, situado en una colina con vistas al mar, o el Hotel Codina, perfecto para quienes buscan una excelente relación calidad-precio.
Cómo Llegar al Antiguo
Llegar al Antiguo es sencillo y cómodo:
- Autobús: Varias líneas de Dbus conectan el barrio con el resto de la ciudad.
- Bicicleta: San Sebastián cuenta con una excelente red de carriles bici.
- A Pie: Un paseo desde el centro de la ciudad te permitirá disfrutar del paisaje y llegar al barrio con calma, recorriendo el icónico Paseo de la Bahía de La Concha. Durante este trayecto, podrás deleitarte con las vistas espectaculares de la playa y la bahía, con la Isla Santa Clara como protagonista. Este camino no solo ofrece tranquilidad y belleza, sino también una experiencia sensorial única gracias a la brisa marina y al ambiente relajado que acompaña cada paso. Sin duda, es una de las formas más encantadoras de llegar al Antiguo.
Conclusión
El Antiguo es mucho más que un barrio de San Sebastián; es una experiencia en sí mismo. Su mezcla de tradición, historia y modernidad, sumada a su belleza natural y oferta gastronómica, lo convierten en un destino imprescindible. ¡Ven a descubrirlo y deja que su magia te conquiste!
